Las 100 compañías de construcción más grandes del mundo generaron 1.511 billones de dólares de ingresos durante 2020, lo que supone un incremento del 3,7% en comparación al mismo periodo del ejercicio anterior, según el informe anual ‘Global Powers of Construction’ (GPoC) elaborado por Deloitte. La publicación analiza cada año esta industria en todo el mundo y analiza las estrategias y el rendimiento de las principales empresas del sector que cotizan en bolsa.

"La pandemia ha afectado a las perspectivas de crecimiento del sector para los próximos años, ya que el mayor endeudamiento provocado por el aumento del gasto público que ha sido necesario para mitigar los efectos económicos de la pandemia puede poner en peligro la sostenibilidad de las finanzas públicas en algunos países y, en consecuencia, las posibilidades de inversión en infraestructuras", afirma Javier Parada, socio responsable mundial de Ingeniería y Construcción de Deloitte. “Sin embargo, la crisis actual sólo debería tener un efecto limitado sobre las megatendencias de largo plazo que continúan presentes y que impulsarán el crecimiento del sector en las próximas décadas, fundamentalmente el crecimiento poblacional en países emergentes, el envejecimiento en los países desarrollados, la tendencia hacia la urbanización, la descarbonización de la economía y la digitalización y transformación tecnológica".

España pierde posiciones en el ranking de ventas

Siete compañías españolas aparecen en el listado de las 100 empresas de construcción que más vendieron durante el año 2020, alcanzando 71.098 millones de dólares de facturación en conjunto. Esta cifra representa el 4,7% del total de ventas a nivel global en la industria y consolida a España entre los países con mayor cuota de mercado, ubicándose ahora en el sexto puesto (5º en 2019) detrás de China, Japón, EE. UU., Francia y Corea del Sur.

La posición­ de las compañías españolas en el ranking de ventas también sufrió una ligera variación en comparación con 2019. La clasificación la lidera Actividades de Construcción y Servicios (ACS), que se ubica en el octavo lugar (7º en 2019), tras cinco firmas chinas, una francesa y otra japonesa. Acciona, por su parte, se encuentra en la posición número 39 (38º en 2019), Ferrovial se ubica en la 42 (46º en 2019) y Fomento de Construcciones y Contratas (FCC) se sitúa en la 43 (47º en 2019). Sacyr sube hasta el puesto 55 (58º en 2019). Por último, OHL se mantiene en el número 74 de la clasificación y Grupo San José vuelve al ranking en la posición 99.

ACS mantiene su posición de líder y única compañía española presente en el Top 30 de ventas a nivel internacional, con ingresos procedentes de operaciones de fuera de España que representan el 86% de su facturación -34.259 millones de dólares de sus ventas totales-. Las francesas Vinci -23.212 millones de dólares- y Bouygues -16.324 millones de dólares- ocupan la segunda y tercera posición, respectivamente.

Ferrovial, ACS y Acciona presentes en el Top 30 de capitalización

En el ranking de las 30 compañías del mundo con mejor capitalización de mercado, Ferrovial registró un crecimiento del 9% -20.249 millones de dólares-, que lo ubica en el sexto lugar de la clasificación. ACS, por su parte aparece en la casilla número 18, tras registrar un crecimiento bursátil del 22% -9.461 millones de dólares-. Acciona es la tercera empresa española en esta clasificación y número 21 a nivel global, con una variación del 35% respecto al ejercicio anterior.

En conjunto, las tres compañías nacionales lograron una capitalización bursátil superior a los 37 mil millones de dólares, cantidad que representa el 8,8% de este selecto grupo.

El sector en cifras

Entre las 100 primeras compañías de ‘GPoC 2020’, algo menos de la mitad de las empresas registraron un aumento de las ventas y 18 de lograron incrementos de dos dígitos. En cambio, 25 firmas tuvieron una contracción de los ingresos superior al 10%.

Por zonas geográficas, las empresas más grandes en términos de ingresos tienen su sede en China, Europa (sobre todo Francia y España), Japón, Estados Unidos y Corea del Sur; estas compañías representan el 48%, 22%, 13%, 8% y 5% de las ventas totales, respectivamente. Sin embargo, solo hay una firma china en el ranking de las 10 primeras por capitalización bursátil y dos de este país asiático en el top 10 por ventas internacionales.

Debido a la incertidumbre provocada por la pandemia de COVID-19, se produjo un descenso del 7,4% en el valor de la capitalización bursátil entre las 100 compañías top.

En esta línea, el rendimiento del mercado de valores varió según la zona. Mientras que en Estados Unidos y Corea del Sur se produjo un crecimiento significativo, los grupos chinos y japoneses experimentaron descensos de dos dígitos y los grupos europeos registraron un decrecimiento del 7,1%. Sin embargo, los precios del mercado se han recuperado en general desde el 31 de marzo de 2020, cuando se impusieron bloqueos en numerosos países.

Previsiones y tendencias del sector para 2021

El estudio alerta sobre la recuperación desigual de la pandemia, puesto que algunos países siguen sufriendo interrupciones y cierres mientras que otros están volviendo a la actividad económica "normal" gracias a las campañas de vacunación masiva. Por este motivo, el informe pone foco en retos que impliquen decisiones estratégicas, como la internacionalización y la importancia de que las perspectivas del sector de la construcción sean consideradas a nivel regional.

Además, el informe destaca que las repercusiones a largo plazo de la pandemia incidirán en las siguientes ‘megatendencias’ en las que el sector basa sus expectativas de crecimiento:

Tendencias demográficas: la pandemia no ha afectado significativamente a las principales tendencias demográficas (aumento de la población y urbanización), pero podría haber un efecto importante del trabajo a distancia, que podría mitigar la tendencia a una mayor urbanización y concentración de la población.

Cambio climático y descarbonización: la pandemia ha acelerado el proceso de descarbonización de la economía, ya que los países y las empresas publican objetivos agresivos de neutralidad de emisiones y los inversores se centran cada vez más en la sostenibilidad y el cumplimiento de los ODS, lo que afectará positivamente a la inversión en energías renovables y en la eficiencia energética de las infraestructuras.

Tecnología y transformación digital: los avances en la transformación digital de las empresas y la sociedad en el último año equivalen a los que se podrían haber realizado en cinco años a ritmo precrisis. Se espera que este proceso se acelere en los próximos años y que dé lugar a importantes oportunidades para la industria en relación con la inversión en las infraestructuras necesarias para satisfacer la creciente demanda.

La capacidad de respuesta que demuestren las empresas para mejorar su limitada rentabilidad actual será fundamental para asegurar su futuro. La mejora en el control de riesgos en la fase de licitación, los cambios en los modelos de contratación encaminados a equilibrar el reparto de los riesgos de construcción entre el cliente y el contratista y de esta forma disminuir la litigiosidad y la mejora de la eficiencia operativa a través de una mayor industrialización y la aplicación de las nuevas tecnologías disponibles serán claves para apuntalar la rentabilidad de las empresas del sector y su éxito a medio plazo.