Vehículos que andan solos por el almacén, pequeños drones que ayudan en el reparto final de paquetes, máquinas que se comunican entre sí, software que sabe lo que va a comprar un consumidor incluso antes que él mismo... Puede parecer ciencia ficción pero toda esta tecnología se está convirtiendo ya en una realidad habitual en muchos centros logísticos de todo el mundo, tal y como se analiza en un informe sobre Logística 4.0 publicado recientemente por la revista Alimarket.

El concepto de cuarta revolución industrial se utilizó por primera vez en el marco de la Feria de Hannover de 2011, en Alemania, y tuvo una consecuencia inmediata en su entorno logístico, dando lugar a lo que ya se conoce como Logística 4.0. Aunque no es fácil articular una definición exacta, podríamos señalar que guarda relación con la interconexión, digitalización y optimización de procesos, datos, personas y máquinas dentro de toda la cadena de suministro en su sentido más amplio, incluyendo transporte, almacenaje, aprovisionamiento, distribución, etc.

Dicho de otra manera, la Logistica 4.0 supone la implementación de la tecnología en todos los procesos logísticos para que su gestión y operación sea más sencilla, ágil y sostenible. Bajo este amplio concepto se engloban toda una serie de innovaciones desconocidas hace hace poco, pero que de forma imparable se están infiltrando en el día a día del tejido industrial internacional. De hecho, las adaptaciones a las nuevas tecnologías 4.0 se han incorporado con mayor rapidez a nuestra vida cotidiana que al entorno productivo.

Big data, internet de la cosas o IoT (siglas de Internet of Things), impresión en 3D, robotos colaborativos, drones, AGV o vehículos de guiado autónomo son algunas de las tecnologías que se engloban bajo el concepto logística 4.0. Su uso, aún incipiente, comienza a normalizarse a un ritmo vertiginoso.

Y es que, a diferencia de innovaciones tecnológicas previas, la aplicación de estas nuevas herramientas no supone necesariamente un gran desembolso, lo que permite el acceso a su uso para empresas de todo tamaño y actividad.

No obstante, algunos sectores están encabezando su aplicación, destacando el papel de la industria de la automoción y el e-commerce. Grandes empresas como Amazon se encuentran a la vanguardia de estas innovaciones, aunque su uso se está democratizando a pasos agigantados entre compañías de todo tamaño y actividad.