La distribución se afana en mejorar su sección de frutas y verduras para aumentar su influencia en la cesta de la compra y ganarse la fidelidad del cliente en un país donde continúa muy arraigada la compra de estos productos en el canal tradicional. Para ello, son muchos los operadores que están rediseñando sus secciones, mejorando los procesos logísticos y aumentando la calidad de estos productos para ofrecerlos en el punto óptimo de maduración.
No obstante, para conseguir estos objetivos necesitan de la colaboración con los proveedores con quienes están estrechando lazos y mejorando las relaciones en la búsqueda de esa excelencia. La capacidad de suministro de los proveedores y la flexibilidad a la hora de negociar precios sigue siendo de vital importancia para la distribución, a la vez que el el tejido productor hortofrutícola se va profesionalizando para satisfacer esas demandas de su cliente potencial. Además, algunos expertos del sector apuntan a un retorno hacia la estacionalidad así como la importancia del producto local y regional y la ausencia de inversión en marca en los productos hortofrutícolas, entre las tendencias más destacables.
En el reportaje del número de octubre de la revista Alimarket se ofrece una detallada radiografía del sector, y en él se pueden encontrar todas las claves acerca de cómo se comportó el mercado hortofrutícola, y las estrategias que se están llevando a cabo en las secciones de las principales cadenas que operan en España.







