Nestlé va a instalar una caldera de biomasa en su planta de chocolates deLa Penilla (Cantabria), con el objetivo de que pueda producir 12.500 t de vapor anuales tras su inicio de actividad, previsto para 2022. La caldera se alimentará de la cascarilla desechada hasta ahora en el proceso de torrefacción del cacao. El vapor producido supondrá un 10% de las necesidades de la fábrica, al tiempo que le permitirá reducir sus emisiones de CO2 en 2.500 t anuales.
La fábrica de La Penilla ya dispone de una planta de cogeneración, operativa desde 1993, que proporciona energía eléctrica y un 75% del vapor necesario para alimentar los procesos de producción. Asimismo, en 2019 se introdujeron mejoras en la caldera convencional de vapor de la factoría con la finalidad de mejorar su eficiencia. De esta manera, a partir de 2022, se prevé que la práctica totalidad de la energía que se produzca sea de alta eficiencia.
En el periodo comprendido entre 2011 y 2020, estas instalaciones han reducido en más de un 83% su uso de agua, en más de un 16% el consumo de energía y en casi un 8% las emisiones en kilogramos de CO2 por tonelada producida. Además, toda la energía eléctrica que se compra en este centro de producción proviene de fuentes renovables. Esta factoría también se considera “cero residuos a vertedero”, al minimizar la generación de los mismos y fomentar su reutilización, reciclaje o valorización.