La exportación española de frutas y hortalizas frescas cerró 2024 con un crecimiento interanual del 8% en volumen y un 5% en valor, al comercializarse 12,3 M t e ingresar 17.703 M€, según datos de Aduanas. Datos muy positivos teniendo en cuenta que se trata de un sector vulnerable ante agente agentes externos como el clima, las tensiones geopolíticas, la falta de mano de obra, competencia de terceros países y regulación de los fitosanitarios.
Por producto, las hortalizas frescas exportadas representaron el 46% del total y creció un 10% respecto al año anterior, siendo el pimiento, el pepino y la lechuga los productos más exportados. El tomate se mantuvo en un cuarto lugar. Las compañías españolas se están encontrando con una fuerte competencia con Marruecos, país que ya se sitúa como tercer proveedor de tomate en la UE, sólo con 22.800 t por detrás de las comercializadas por España. Y es que el país está llevando a cabo planes ambiciosos para contar con un sector hortícola competitivo a medio plazo.
En valor, España facturó 8.044 M€, un 2% más en relación al año precedente, sin embargo, en Europa, España lidera las ventas lo que evidencia la calidad del producto español, con un precio muy por encima de los de otros países de la competencia. “Y ahí es donde tenemos que estar”, explican desde Unica Group, principal exportador hortofrutícola en España. No obstante, el producto español tiene que coexistir con la tendencia creciente de más producto local y de proximidad, que llega a desplazar al producto español en meses de campaña nacional.
En cuanto a las frutas, la exportación de estas ascendió a 6,6 M t (+7%) y un valor de 9.658 M€ (+8%). España es el primer suministrador de frutas de la UE, y los cítricos españoles son los productos más demandados por los clientes en el exterior, y representan el 25% de las compras totales de frutas y hortalizas en la UE. Pese a la competencia de países como Egipto, Turquí e Israel, hay clientes que aseguran que la diferencia es sustancial en comparación a otros orígenes. Hay que destacar la positiva evolución que también tuvo la fruta de hueso el año pasado, con crecimientos como el de la nectarina, con un 13% más en volumen y un 11% más en valor, o la paraguaya, con un 10% en volumen y un 17% más en valor. También resaltó la evolución de los frutos rojos, como la fresa y la sandía, situándose como la tercera fruta más exportada, tras la naranja y la mandarina.
La UE es el mercado natural para las frutas y verduras españolas, y si incluimos a Reino Unido, Suiza y Noruega, hablamos del 97 % del total exportado. Tal es la hegemonía de España como productor hortofrutícola, que muchas cadenas europeas cuentan con centrales de compras instaladas en nuestro país para estar más cerca de la producción.
Pese a los buenos datos, el sector se enfrenta a ciertas dificultades, algunas de ellas con poco margen de maniobra, como las crecientes políticas comerciales regionales. A su favor, las empresas hortofrutícolas están invirtiendo en mejoras en postcosecha, logísticas y en negociación. Y es que en España se ha creado el mejor cluster de conocimiento hortofrutícola a nivel mundial.
Si desea conocer más detalles sobre el contexto y quiénes son los principales exportadores de nuestro país, puede consultar el reciente informe sobre la Exportación Hortofrutícola 2025 que ha elaborado Alimarket.