La crisis mundial provocada por el coronavirus Covid-19 también ha puesto en jaque al modelo ferial. El impacto económico que le supondrá a los eventos feriales y jornadas, foros y encuentros profesionales que se celebran en España aún está por determinar, pero sin duda cambiará este modelo de negocio, al menos hasta que se descubra una vacuna.

Aunque es pronto para hacer cálculos, el impacto económico para las instituciones y recintos feriales será muy importante. Sólo en 2018 el más de medio centenar de instituciones y recintos feriales que operan en España alcanzaron una facturación conjunta de 485 M€ (cerca de 500 M€ en 2019), con más de 3.000 eventos celebrados, cerca de 650 ferias comerciales y alrededor de 15 millones de visitantes, según datos del Informe sobre Instituciones y Recintos Feriales de Alimarket Construcción.

La facturación podría caer un 80%

Hasta la fecha sólo han podido celebrarse los eventos programados para los meses de enero y febrero, pues empezaron a cancelarse a partir de la segunda semana de marzo. Si la situación persiste de aquí a final de año, estaríamos hablando de una caída de los ingresos del orden del 80%. A ello hay que sumar el impacto que estos eventos suponen para la economía del país, con millonesde visitantes que consumen turismo, ocio, restauración y alojamientos en estas ciudades. Se estima que estos eventos en España tienen un impacto económico que anualmente ronda los 9.000 M€.

En lugar de albergar estas ferias, recintos como el Ifema y Fira Barcelona se han convertido en hospitales de campaña temporales aprovechando sus infraestructuras. Así, el Ifema se convirtió en el hospital más grande de España tras habilitar dos pabellones para albergar 1.300 camas convencionales, con 96 puestos UCI, alcanzando los 35.000 m2 de superficie. Por su parte, Fira Barcelona habilitó un pabellón en su recinto Gran Vía con 300 camas ampliables a 2.000 por si fueran necesarias.

El mayor alíado de este coronavirus es el contacto social y precisamente ese es el punto sobre el que gira todo el negocio ferial: los contactos entre profesionales.

Por el momento, todos los eventos que se iban a celebrar en España y en los países afectados por el Covid-19 o han sido aplazados en el calendario hasta después del verano o por el contrario han sido cancelados. En el caso de las ferias relacionadas con el sector de la construcción, se han pospuesto para otoño el Salón Inmobiliario de Madrid (Sima) y la feria de urbanismo y Medio Ambiente Tecma, que iban a celebrarse en el Ifema. También se han retrasado otros dos certámenes en Fira Barcelona: el salón Paint & Coatings y el encuentro de la industria química Expoquimia.

El salón internacional de maquinaria de construcción Smopyc, que iba a celebrarse en Feria de Zaragoza, también ha cambiado dos veces de fechas y finalmente se celebrará en 2021. Igualmente se han aplazado hasta el cuarto trimestre del año citas como Greencites en Feria de Málaga (Fycma), Eficam en el Palacio de Cristal de Madrid, la Biehm en el BEC de Barakaldo (Bizkaia), y la Feria de la Vivienda de Aragón en el Auditorio de Zaragoza. Otros eventos se han cancelado y se celebrarán el próximo año como la segunda edición del Forum Holzbau, dedicado a la construcción en madera.

A nivel mundial ha sucedido lo mismo con el resto de citas programadas, como Light+Building en Alemania, Samoter y Asphaltica en Italia y Mosbuild en Rusia, por citar algunas.

Cambios en su formato y posibles restricciones

Sin embargo, a día de hoy, incluso después del verano la celebración de todas ellas es una incógnita a expensas de la evolución de la pandemia. Sin duda cambiará también cómo se deberán realizar estos eventos multitudinarios si es que al final reciben la aprobación del Gobierno para que puedan celebrarse durante este año. La distancia de seguridad, el uso de guantes y mascarillas, los geles hidroalcohólicos desinfectantes, el control de la temperatura, el uso de los smartphones o las mamparas de separación quizá serán elementos indispensables para su celebración. El uso de la tecnología jugará un papel fundamental en la celebración de estos eventos en detrimento, por ejemplo, de los catálogos, revistas, tarjetas de visita, periódicos o todo tipo de folletos que se reparten.

También habrá que ver cómo evoluciona la pandemia en el resto de países. La mayoría de estos eventos son internacionales, por lo que la llegada de muchos visitantes dependerá del control que se imponga a personas procedentes de determinados países.

De momento, hay empresas que han puesto en marcha algunas alternativas para tratar de paliar los efectos de estos eventos o mantener un mínimo de actividad. En este sentido las denominadas webinar (conferencias, talleres o seminarios que se transmiten en directo vía internet), van ganando adeptos como alternativa al modelo presencial. Es el caso de SimaPro, el ciclo de jornadas profesionales paralelo al Sima, y que ha puesto en marcha diferentes jornadas virtuales con profesionales y expertos del sector. También Epower&Building ha participado en una webinar sobre el Panorama Mundial de la Construcción frente a la crisis del Covid-19, organizado por la Comisión de Asuntos Internacionales de la Cámara Chilena de la Construcción.

La ferias deberán potenciar su desarrollo digital y la capacidad de las empresas para poner el valor su producto en la distancia será un elemento clave que marcará el futuro de estos eventos durante los próximos meses o quizá años.