El grupo papelero Lecta, integrado por la española Torraspapel, la francesa Condit y la italiana Cartiere de Garda, recibirá una inyección de 150 M€ como una de las medidas para mitigar el impacto del Covid-19 y preservar la liquidez.

De este montante, unos 50 M se recibirán en forma de ampliación de capital y otros 50 M a través de una emisión de bonos a 2025, mientras que los 50 M restantes vendrán en forma de ayudas gubernamentales mediante un crédito con bancos españoles. La emisión de deuda quedará por completo suscrita por fondos o firmas gestionadas por Apollo, Cheyne Capital y Tikehau.

Según un comunicado publicado por Lecta, esta operación le permitirá "no sólo superar los desafíos presentados por la pandemia Covid-19, sino también continuar su proceso de transformación y emerger con una posición sólida de liquidez y un balance saludable".

En relación a este proceso, tanto la española Torraspapel como su filial Torraspapel Distribución están, según datos del Registro Mercantil, en la fase de acuerdos de refinanciación, dentro del proceso preconcursal que se lleva desde el juzgado n.1 de Madrid.

Recordemos que el año pasado, CVC cedió la propiedad de Lecta a los acreedores para asegurar su supervivencia, lo que implicó la refinanciación de la deuda que ascendía a 600 M€. En su último ejercicio, la papelera cerró con ventas de 1.382,8 M€, un ebitda de 93,3 M€ y pérdidas de 51,3 M€.