DSV Solutions Spain, filial del grupo DSV especializada en servicios logísticos, volvió a incrementar su cifra de negocio durante el pasado 2019. En concreto, la compañía alcanzó una facturación de 66 M€, lo que representa un avance del 6,5% si se compara con la cifra del ejercicio anterior. "La evolución ha sido positiva en general", analizan desde la empresa, "pero con estancamiento en el crecimiento de las ventas de algunos sectores". De su ingresos por actividad logística, en torno a un 75% se corresponde con clientes de gran consumo, lo que la sitúa entre las 15 primeras empresas de este sector, según se analiza en un reportaje que Alimarket publicará en los próximos días.
Entre las novedades protagonizadas durante el pasado año por la división logística del grupo danés destaca la apertura del centro que se puso en marcha en los primeros meses de 2019 en Cabanillas del Campo (Guadalajara) y que fue resultado del aumento de las necesidades de su cliente Continental para el suministro de neumáticos en España. Dicho espacio, de más de 30.000 m2, cuenta con un sistema automático de selección de neumáticos capaz de clasificar y etiquetar más de 1.500 neumáticos a la hora.
Con esta apertura, DSV Solutions alcanza una capacidad de almacenaje de 263.000 m2 repartidos en nueve almacenes: cuatro de ellos en Guadalajara, tres más en distintas localidades de la provincia de Barcelona (Rubí, Argentona y Subirats), uno en el municipio madrileño de San Fernando de Henares y, por último, uno más en la plataforma alavesa de Arasur. A medio plazo, mantiene el proyecto de apertura de una nueva nave en Molins de Rei -también en Barcelona-, cuya inauguración está prevista para el año 2021. Como ya se publicó en su día, esta plataforma, desarrollada por el grupo inmobiliario Goodman, consta de dos fases: una primera instalación de 14.000 m2 para el área de transporte y un segundo edificio multinivel de 32.000 m2 para el negocio logístico.
Paralelamente, la compañía ha completado diversos proyectos destinados a mejorar su operativa: "Hemos invertido en nuevas zonas APQ y de temperatura controlada para satisfacer la demanda del mercado. Por otra parte, también hemos incorporado herramientas de robotización y automatización de procesos". Entre los principales problemas a los que se enfrentan, y que son comunes al resto de empresas del sector, destaca la dificultad de conseguir espacio disponible y a un precio adecuado. "Otro reto es el de la mano de obra en el almacén, ya que encontrar personal cualificado y estable a veces constituye un problema. Por otra parte, hay que destacar la evolución del trabajo manual hacia la robotización y la mecanización", concluyen.
