Conclusión y recomendaciones
Existe una conciencia creciente sobre la necesidad de educar y formar apropiadamente a los profesionales sanitarios en las competencias digitales a fin de hacer efectivo el potencial de las TIC en Salud para mejora la calidad y la eficiencia de los servicios sanitarios. Esto requiere que el papel de los profesionales sanitarios se revise para examinar los huecos de conocimiento y destreza y así identificar las oportunidades de desarrollo profesional y de necesidades de educación. Hay que tener en cuenta que la transformación digital es un proceso evolutivo con incorporación continua y cambios en las propias herramientas y las tecnologías que las soportan. Por ello las actuaciones, siendo urgentes, requieren de una perspectiva estratégica a largo plazo alineada con la propia estrategia de Salud Digital.
Ciertamente, la adecuación de los recursos humanos a la transformación digital de la sanidad es una cuestión compleja. Son muchas las partes que intervienen, directa e indirectamente en su capacitación digital. Más allá de las organizaciones sanitarias donde prestan sus servicios los distintos profesionales, hay que contar con el mundo académico, sindical, las sociedades científicas, las organizaciones profesionales y las empresas del sector. Además, existen muchas interrelaciones, algunas no explícitas y con cruces de intereses. La situación no se puede abordar con soluciones simplistas coyunturales para atender las demandas del momento y a nivel local, sino que requieren una visión holística sistémica con visiones a largo plazo que generen estrategias y programas de actuación con perspectivas de futuro y sentido de anticipación a la evolución de la transformación digital y su impacto en el Sistema Sanitario y sus organizaciones.
A forma de resumen podemos decir que el cambio impulsado por la transformación digital sólo mejorará los indicadores de salud si, en primer lugar, se hace un uso adecuado de la tecnología, y, en segundo lugar, se adaptan los perfiles de la fuerza laboral tanto la de los profesionales sanitarios como la de los profesionales TIC en salud y de los directivos, para poder responder a los retos de la transformación digital.
Teniendo en cuenta las características y dimensiones del sistema sanitario, la mejora en la formación de capacidades digitales en el sector requiere acciones de muy amplio alcance en educación reglada, en el desarrollo profesional continuado y en la adopción de metodologías, enfoques de actuación y procesos de evaluación. Una de las dificultades es que la mayoría de los entornos docentes involucrados en la educación de los profesionales sanitarios no tiene recursos ni capacidades para abordar este reto que además requiere una aproximación multidisciplinar.
El proceso de la trasformación digital del sector de la Salud depende del grado de competencia de los profesionales sanitarios en el dominio de las herramientas TIC. Esta competencia, o más propiamente la falta de la competencia se reflejará necesariamente, si no se toman medidas, en la eficiencia en las organizaciones sanitarias, la calidad de los servicios y los riesgos para la seguridad del paciente a la vez que se perderán las oportunidades que brinda el sector para el desarrollo de nuevas oportunidades laborales y profesionales.