El sector del delivery ha vuelto a sufrir un nuevo varapalo al ejercicio de su actividad, tras la presentación el pasado viernes, de la nueva normativa que regulará la actividad de los supermercados y cocinas fantasmas en la ciudad de Barcelona. Aunque está previsto que la regulación se apruebe de manera definitiva el próximo 27 de enero, el grado de consenso entre los partidos políticos hace presagiar que con toda probabilidad saldrá adelante.
El Ayuntamiento de Barcelona ya aprobó de manera inicial en marzo de 2022 y sometió a consulta pública su 'Plan de usos de actividades vinculadas al reparto a domicilio'. Este plan es el que regula de manera transversal el ecosistema del comercio online, con especial hincapié en los servicios y establecimientos vinculados al reparto de última milla, como son las cocinas industriales y/o agrupadas, la restauración o los almacenes. El texto regulatorio inicial ya prohibía la apertura de nuevos supermercados dedicados al delivery (los denominados dark stores o supermercados fantasma) en la Ciudad Condal, por lo que desde entonces todas las nuevas licencias de actividades quedaron suspendidas. Asimismo, limitaba las cocinas dedicadas a esta actividad a suelos industriales y ponía coto a los locales de platos preparados, así como a las taquillas de uso turístico, destinadas a almacenar de manera temporal equipajes o maletas (aunque estas no son estrictamente actividades de reparto a domicilio). De igual forma, regulaba el uso del espacio público relacionado con el tiempo de espera y el movimiento de los repartidores.
Madrid también presentó entonces una serie de regulaciones, entre ellas, que estos centros logísticos no podían estar en zonas residenciales si superaban los 350 m2 de superficie.
Ahora el Gobierno de Ada Colau da un paso más en materia regulatoria respecto a su propuesta inicial. Así pues, los 21 almacenes que actualmente operan en la Ciudad Condal de compañías como Glovo o Getir, deberán reconvertirse en establecimientos abiertos al público o almacenes al por mayor para continuar operando, de lo contrario, tendrán que cerrar. Asimismo, reitera la prohibición sobre la actividad de las dark kitchen dentro la ciudad.
Con motivo de la noticia, desde Glovo, una de las plataformas que se vería más afectada por la futura regulación, han indicado que todavía están analizando el alcance de la nueva normativa municipal. También a falta de disponer del detalle del texto final, desde la Asociación Española de Economía Digital, Adigital, han reiterado el posicionamiento que adoptaron cuando se abrió el proceso de consulta al trámite inicial del plan. Entonces Adigital abogó por "establecer medidas alternativas menos restrictivas a las actuales" e incidió en "la importancia de no discriminar los servicios que se ofrecen a los ciudadanos en función del canal (online u offline)". Además, desde la asociación se echaba en falta un estudio previo que valorara el impacto de las medidas previstas en la futura nueva regulación, así como de las externalidades de las actividades reguladas pues consideraba que las medidas incluidas no estaban necesariamente enfocadas a preservar el medioambiente y la habitabilidad de las ciudades.
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