La Generalitat Valenciana ha anunciado su intención de iniciar antes del próximo verano el proceso de negociación con la empresa concesionaria del Hospital de La Marina, en Dénia (Alicante), para resolver su contrato de forma anticipada. Como se recordará, la empresa adjudicataria, Marina Salud, está encabezada por la aseguradora DKV, que también ha anunciado recientemente que era partidario de explorar una hipotética salida y alcanzar un acuerdo a tres bandas. El tercer actor implicado en esta negociación sería la compañía valenciana Ribera Salud, que cuenta con un 35% de Marina Salud y que encabezaba también la gestión del departamento de salud de La Ribera, recientemente recuperada por la Generalitat Valenciana, en este caso, al cumplir el pasado 31 de marzo el plazo inicial de la concesión.
De hecho, la Generalitat ha aclarado que su intención es ir rescatando las concesiones sanitarias "a medida que vayan venciendo" o cuando se den determinadas situaciones que aconsejen una resolución adelantada, como es el caso del Hospital de Dénia, cuya concesión finaliza en 2024.
Inversiones para el Hospital de Alzira
Una vez recuperada la gestión del Hospital de Alzira, en Valencia, y del departamento de salud de La Ribera, la Generalitat Valenciana ha diseñado un plan para el mismo, con una inversión de 7,8 M€ durante el periodo 2018-2019, destinada a incrementar las prestaciones, dignificar los edificios y, donde sea necesario, aumentar los puestos de trabajo.
Extinción del modelo Alzira
Al margen del recién recuperado Hospital de Alzira, y del mencionado de Dénia, en la Comunidad Valenciana existen aún tres hospitales públicos de gestión privada en Torrevieja, Elche y Manises. Los dos primeros están en manos de Ribera Salud, mientras que el tercero es gestionado por la aseguradora Sanitas, quien también se hace cargo de un centro de estas características en la localidad madrileña de Torrejón de Ardoz.
También está externalizada la gestión del servicio de resonancias magnéticas, con un contrato que finaliza el próximo 30 de septiembre y cuya recuperación está preparando también la Generalitat Valenciana. En este caso, el Consell ha aprobado una licitación dirigida a cubrir el periodo de transición que se establecerá en el proceso de internalización del servicio.
